El precio de la vuelta al cole

Con el presupuesto debilitado por las vacaciones, las familias españolas afrontan uno de los mayores esfuerzos económicos del año: el inicio del nuevo curso. Diversificar las compras o seleccionar las marcas son algunas de las estrategias que ayudan a aligerar los gastos.

Llegó el final del verano, se acerca el momento de regresar a las aulas y afrontar, un año más, los gastos que conlleva el inicio del curso. Se trata de uno de los momentos críticos del presupuesto familiar, en el que el dispendio de septiembre se une a la resaca económica de las vacaciones. Un informe publicado antes del verano por el Instituto de Estudios Turísticos indicaba que los españoles gastaríamos en las vacaciones un promedio de 50 euros diarios por persona si viajábamos por España, y 100 euros si salíamos al extranjero. En sólo 15 días, una familia de cuatro miembros destina una media de 2.500 euros. Esta cantidad obliga a casi un tercio de los españoles a recurrir a créditos.

Éste es el contexto de muchas familias en el momento de hacer frente al precio de la vuelta al cole. Según datos de un estudio realizado el año pasado por la Federación de Usuarios y Consumidores Independientes (FUCI) en un centenar de colegios públicos, concertados y privados, el coste medio derivado del inicio del curso fue de 716 euros por niño -la cifra oscilaba entre 400 y 1.000 euros-. Si se considera el precio de las matrículas, este curso el gasto será similar al del año anterior.

Matrículas y libros. Mientras para los alumnos de colegios públicos y concertados la matrícula es gratuita, en los centros privados cuesta una media de 220 euros. Según informes de la Confederación Española de Amas de Casa Consumidores y Usuarios (CEACCU), el gasto mensual en estos últimos ronda los 220-350 euros. En el mes de septiembre, el grueso del gasto familiar se dedica a la renovación del equipamiento escolar (materiales, uniformes, ropa…). Con el inicio del curso empiezan también los pagos de transporte y comedor, que serán constantes a lo largo del año.

La vuelta al cole suele ser, además de un motivo de contrición para los chicos, el estribillo de más de una campaña publicitaria. El fin cada vez más apresurado de las rebajas y el incremento sostenido en los precios encarecen cada vez más el equipamiento escolar. Como cada año, los gastos en ropa y calzado, o en el uniforme, ocupan el primer lugar del total con una media de 260 euros por alumno (20 más que el año pasado). Le siguen los libros de texto, el material escolar, el precio del comedor y el transporte. Estas últimas partidas se disparan si el colegio es privado.

Comprar el lote de los libros de texto para todo un curso cuesta entre 165 euros y 220 euros de media, según se trate de estudios de primaria o secundaria. Además, una tendencia que se confirma es la ampliación progresiva de los títulos que necesitan los más pequeños: los libros de idiomas, especialmente, pero también de enseñanza musical, refuerzo y motivación a la lectura, o estimulación intelectual, ya forman parte del lote considerado como básico.

Material escolar. Los precios del material escolar, tal vez por ser considerado una compra menor, no siempre se estudian con cuidado. Sin embargo, adquirir los CD, disquetes, cuadernos, carpetas, forros adhesivos, lápices, bolis y el resto del material indispensable para iniciar el curso representa un gasto entre 75 y 120 euros. Hay que vigilar, además, el precio del resto de materiales (grapadoras, tijeras, taladradoras, reglas y compás), que elevará la factura final. A esto hay que sumar la mochila, cuyo precio oscila entre 30 y 60 euros.

Ropa y calzado. Suele ser la partida más cara del presupuesto. Preparar el equipo completo de ropa y calzado cuesta por encima de 160 euros por niño. Si hay que renovar el uniforme, esta cifra puede superar los 300 euros. Esta horquilla de gasto depende del nivel educativo y del tipo de centro escolar, de si se van a realizar actividades extraescolares, se va a comer en casa o en el colegio o si es necesario uniforme. La Federación de Usuarios-Consumidores Independientes calcula que el desembolso en uniforme y ropa es, para los alumnos de colegios públicos, de 120 euros; para los de los concertados, 240, y para los privados, superior a 250 euros.

E ¿Cómo ahorrar? Si hablamos de productos básicos (ropa y calzado) u obligatorios (libros de texto) no queda mucho margen para el ahorro. Sin embargo, existen algunas estrategias. Reciclar los libros (uno de los gastos más elevados) es una de ellas. Aunque cueste adaptarse a este tipo de ahorro, es indudable que prestarse los libros entre hermanos, vecinos o amigos es una buena forma de aligerar el presupuesto. De esta manera no sólo se ahorra, también se educa en valores como la solidaridad, la cooperación y el cuidado del material.

Otro recurso es comparar el precio entre marcas. Los chicos pueden llegar a obsesionarse por determinadas firmas. Según algunos psicólogos, tener o no alguna prenda de moda representa para ellos una forma de mantener su estatus o su identidad dentro del grupo. Por ello es importante la comunicación desde que son pequeños, a fin de que comprendan que la buena calidad no es exclusiva de las marcas más publicitadas. Prescindir de las firmas más caras puede suponer un ahorro hasta del 40% en los gastos escolares.

Recortar la inversión en el equipamiento escolar es una misión difícil, pero no imposible. Diversificar las compras puede aliviar el gasto en un 30%, según la CEACCU. Lo mejor es comparar precios y completar el equipo buscando los más ventajosos. Asimismo conviene escalonar las compras y no dejar que se acumule todo.